Llegamos a Ho Chi Minh el martes 22 de mayo a las 10 de la mañana. Que calorrrrrrrrrrr!! no solo la temperatura sino la sensación térmica, la humedad, la falta de aire. Que locura Ho Chi Minh!. Dije que en Shanghái había muchas motos…… bueno dije un disparate. Después de llegar a Ho Chi Minh es Shanghái solo hay algunas motitos….. es en Ho Chi Minh en donde hay un disparate de motos!!!! y un disparate de aventura es cruzar la calle! Semáforos hay. Cebras hay. Pero no sirven para nada!!! La única manera de cruzar es formarse en bloque y mandarse. Adelante con fé que todo va a salir bien. Y todo sale bien. Siempre cruzamos bien. Todo cruzan así y siguen camino.
Luego de instalarnos en el hostel, salimos a comer algo. Ven cinco “turistas” caminando y mirando para todos lados y empiezan a llamarte con las manos y a las risas hello! hello! salen del restaurante al medio de la calle con la carta en la mano y ahí poco más que esquivando motos “hello! where are you from?” mientras te señalan los platos y terminás entrando, porque es más fácil entrar que seguir esquivando motos. Y no te arrepentís. La comida es muy rica y los precios son muy bajos. Platos de 2 usd a 5 usd.
La comida en Vietnam es mucho más rica que en China. Desde que llegamos en la mayoría de los casos he elegido comida vietnamita, pollo con verduras y arroz, ensaladas con salsas agridulces, verduras gratinadas con queso, arroz con frutos del mar, pescado a la cacerola con verduras….. muuuy rico.
Al día siguiente de haber llegado a Ho Chi Minh partimos a Mui Ne. Mui Ne es un pueblo de pescadores que se encuentra a casi 5 horas de Ho Chi Minh. En los últimos años este pueblo se ha convertido en un destino turístico, así que es muy llamativo ver como conviven los hoteles con las casas de pescadores a orillas del mar y sus barquitos de pesca a los que le llaman barcos cesta y parecen como una palangana grande.
Los habitantes de Mui Ne son muy agradables y parece estar muy contentos de recibir visitantes. Son muy educados y aunque no compres o contrates lo que te están ofreciendo siempre se van con una sonrisa.
Para poder recorrer “la” calle del pueblo, alquilamos una moto. En realidad alquilamos la moto de uno de los pobladores. Ellos alquilan sus propias motos por 8 usd por día y bueno…. ese día andan a pié .(sepan disculpar la calidad de la siguiente foto :()
Desde Mui Ne regresamos a Ho Chi Minh donde nos tomamos una excursión para ir a pasar el día al delta del río Mekong. Este paseo hizo que conociéramos una parte muy importante de la realidad de esta zona de Vietnam. No es playa, no es ciudad, es una vida en torno al río. Allí se encuentran los mercados flotantes, donde se venden frutas y verduras al por mayor. La producción se da en las márgenes del río y el canal de comercialización y directamente en los botes. Cada bote es un puesto y los compradores se trasladan en botes más pequeños.
En esta zona el clima es muy húmedo (en lo personal el clima más húmedo que he conocido). Sobre esta época del año llueve unas cuantas veces al día. La temperatura, la lluvia y el sol (que sale cada vez que para de llover) hacen que la vegetación sea abundante y los frutos tropicales crezcan como crece la maleza.
Las casitas son muy precarias, están ahí en medio de todas las plantas y árboles autóctonos, en medio de la humedad del río y la humedad de la atmósfera. Por un momento sentí que si tuviera que vivir ahí me enloquecería. Me acordé mucho de mi madre que se queja cuando llueve más de dos días seguidos por la humedad de la casa, que no se puede ventilar y no se seca la ropa.
Por otra parte la vida en el río es todo alegría. Los niños se bañan, juegan, los botes cruzan a lo largo y a lo ancho transportando frutas, verduras, flores y pasajeros. Nadie tiene mala cara y aunque no entiendo su idioma, les puedo asegurar que por sus gestos ningún habitante del río Mekong anda diciendo “lo que mata es la humedad”.
Luego de conocer lo que conocí de Vietnam, no puede evitar pensar un poco sobre que es lo que hace que un lugar te guste ó no. Puede ser el paisaje, la comida, su gente, ciudades, construcciones, el idioma. Lamento no poder detallar en estas líneas que es lo que tiene Vietnam que hace que me haya gustado tanto. Tiene ese que se yo que tienen las cosas cuando tienen encanto.
En este momento (en que publico este relato) estamos en Malasia, son las cuatro de la madrugada, llegamos hace dos horas. Aún no hemos visto nada. Que ilusión me provoca saber que mañana despertamos en una nueva ciudad, un nuevo país…… todo lo que sé de Malasia es que aquí se jugó el mundial sub 20 en el 1996? Con la selección de Victor Púa y que Uruguay salió segundo…
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