Al llegar a Canasvieras en la isla de Florianópolis el ante penúltimo día del año 2013, poco conocía de Brasil. En el año 2010, sólo había visitado el estado de Río Grande do Sul, la isla San José del Norte, Balneario Casino y muy poca cosa más. Está esa idea de que los países vecinos siempre habrá tiempo de conocerlos, entonces cuando tenés tiempo te vas más lejos.
No voy a dejar de ser sincera y la verdad que no había elaborado ninguna expectativa respecto a este viaje y lo que es más, no sabía si el tan nombrado Florianópolis sería de esos lugares que me gustan. No fue planificado, simplemente con dos de mis grandes amigas, Gime y Maru, se nos ocurrió espontáneamente ir a despedir el año a algún lugar. Dada la intensidad y particularidades del año 2013 tenía que ser un sitio que se caracterizara por la alegría, la diversión y los grupos de amigo/as. Sitios románticos y destinados para lunas de miel ya hemos visitado en otras ocasiones y quizás, no se sabe, quedarán para otro momento de nuestras vidas.
Es así que nos compramos un paquete por internet que incluía pasaje y estadía. Solo sabíamos que el sábado 28 de diciembre a las 14:00 hs teníamos que estar en Bulevar Artigas enfrente a la plaza Varela, allí partiríamos hacia el estado de Santa Catarina, Brasil. Llevábamos bikini, ropa de playa y ropa blanca para no faltar a la tradición del país vecino y empezar el año con todos los rituales.
El viaje en ómnibus duró unas 24 horas, con unas cuantas paradas. Igualmente, fue muy ameno, ya que muy rápidamente todos los pasajeros tuvimos muy buena onda. El domingo sobre las 15 hs llegamos a nuestra posada, nos dimos un baño, nos pusimos el bikini, bajamos a la playa y en medio de la música, la multitud de gente y los carritos de choclos y caipiriñas dijimos “que viva la alegría de Brasil!!”
Desde ese momento hasta el domingo siguiente a las 15 hs repetimos una “cuasi – anti – rutina perfecta”: a la mañana playa, a la tarde playa, a la tardecita/noche playa, a la noche bailar. Todo acompañado de caipiriñas, cervezas, música y mucha alegría….
A continuación les dejo los datos prácticos que pueden ser útiles para los lectores de cpcolombia.org
¿Dónde comprar reales?
Llevé reales desde Uruguay donde me hicieron un cambio de 9.2 pesos por real. 1 real = 9.2 pesos Uruguayos = 0.43 centavos de dólar. También cambié dólares en Canasvieras. Sobre la calle principal hay muchos “arbolitos”. Por lo general son hombres que están con una calculadora colgando del cuello y que repiten sin parar “cambio, cambio, dólar, real peso argentino, cambio”. En Canasvieras me hicieron: 1 real= 9.06 pesos uruguayos = 0.42 centavos de dólar. No hay mucha diferencia, pero para cambiar más cantidad de dinero, a los uruguayos nos conviene hacerlo allá.
Canasvieras
Nos hospedamos en el Apart Hotel La Cabana, muy sencillo pero con todo lo necesario para pasar esos días. A dos cuadras de la playa y a una de los boliches.
La playa de Canasvieras no es una de las más lindas, pero de todos modos tiene lo suyo. El agua tiene una temperatura espectacular (los uruguayos estamos acostumbrados a nuestras aguas frías). Hay muy poca arena y si llegas después de las 11 de la mañana prácticamente no hay lugar para sentarte. Terminas en medio de la gente, todos como grandes rondas de “amigos” de una tarde de playa.
Es muy recomendable llevar sombrilla. Nosotros compramos sombrillas y sillas. La sombrilla nos costó 35 reales y las sillas, 55 reales. Alquilar una sombrilla con dos sillas tiene un costo de 25 reales por día (aproximadamente). Si estás más de tres días te conviene comprarlas.
Para hacer las compras hay dos supermercados que tiene precios muy similares a los de Montevideo. Lamento no recordar los precios con mucho detalle, pero un surtido para tres personas de agua (mucha), frutas (mucha), jugos, jamón, queso, panes, yogur, leche nos costaba unos 60 reales.
Nosotros optamos por almorzar en la playa, hay muchos carritos que venden, choclos (5 reales), empanadas, quesos (3 por 10 reales) (tipo provolone, aunque no tan rico como el uruguayo), brochetas de carne, ensaladas de frutas (5 reales), licuados de frutas (entre 5 y 10 reales), caipiriñas (7 reales).
En cuanto a la oferta gastronómica a la carta, no puedo decir demasiado. Por el tipo de vacaciones que optamos no salimos demasiado a comer afuera. Algunas noches fuimos a comer pizzas ó algún menú por el estilo. El costo no supera los 15, 20 reales por persona con bebida incluida. Personalmente, el tour gastronómico de los lugares que visito es algo que me gusta mucho hacer, sin embargo, esto de estar con amigas todo el tiempo realizando actividades, al final del día, la dinámica termina siendo otra, así que en esta oportunidad lamento no poder compartir “impresiones del paladar”, como en otras ocasiones.
La noche de Canasvieras es pura diversión, en un par de cuadras (un par de manzanas) se concentran casi todos los boliches. En su entorno abundan chicos y chicas promotoras que te entregan invitaciones, por lo general chicas free y los chicos con descuento. Mojito, Barracao, Maluco, Mood, son algunos de los lugares. En todos pasan música brasilera y música argentina. No se puede negar que la influencia argentina es tan fuerte que por momentos (sobre todo en la noche) te olvidas que estás en Brasil… parece que cruzaste el río de la plata en lugar de haber subido al norte carioca. A muchas personas esto los decepciona un poco, personalmente no me molesta, en última instancia somos “países hermanos” y todos buscamos pasar unas divertidas vacaciones.
Otras playas de la Isla
Nos habían contado que en sur de la isla están las mejores playas y efectivamente lo comprobamos. Para poder recorrer, alquilamos un auto (3 días 360 reales, llenar el tanque 145 reales y sobró nafta, no nos dio el tiempo de gastarla).
Fuímos a Ingleses, Barra de Lagoa, Joaquina, Jureré, Mole, Santinho, Santo Antonio de Lisboa, Daniela. Todas son playas hermosas y cada una tiene lo suyo. Algunas se caracterizan por el color y la amplitud de la arena, olas más fuertes, más tranquilas.
Paseos, tours y barcos piratas
Tanto en la playa de Canasvieras como en el centro, todo el tiempo te están ofreciendo paseos, tours por las playas (comprar estos tours es una de las alternativas a alquilar un auto), fiestas y los clásicos y muy divertidos barcos piratas.
Nosotras fuimos a dos paseos en barco. Uno que salía a las 11 de la mañana, sería el barco de día y otro “la fiesta en el barco” que se inauguró el 1 de enero y se realiza a la noche de 18 a 21 horas. Ambos barcos se reservan con 5 reales y tienen un costo de 50 ó 55 reales (dependiendo de la cantidad de tickets que compres) , la diferencia se paga al subir al barco.
El barco de día es un ambiente divertido y bastante familiar. Para en medio del océano para tirarte al agua, tuvimos la suerte de ver delfines, te hacen un recorrido por la isla de los franceses, una fortaleza y se cruza hasta el continente donde se almuerza. Hay animadores (el capitán pirata y una bailarina) que lideran coreografías, concursos de baile por tragos, etc.
El barco de la noche es una fiesta que se acerca más al descontrol. También hacen la parada para lanzarte al agua, todo el tiempo hay música al estilo discoteca con DJ y animador y también hay concurso de baile que termina con un striptease de las participantes. Aquí es donde es necesario recordar que hasta la diversión tiene un límite y estas tres uruguayas se mantuvieron lejos de la tarima, con la misma alegría de siempre pero sin ser protagonistas ;). Es muy importante darse cuenta el momento en el cual el show lo realizan otros.